San Paolo Pizza Bar es el nuevo restaurante del grupo Rubaiyat donde podrás probar algunas de las pizzas más ricas de Madrid. Su origen ítalo brasileño, al estilo paulista, combina una rica selección de ingredientes con una masa espectacular, lo suficientemente grande como para compartir.
Se puede ver al pizzaiolo brasileño Deco Lima (creador de las pizzerías Bráz, en Sao Paulo, Brasil) trabajar, junto a su equipo, en el horno italiano de las cocinas del restaurante San Paolo. Productos de primera, amasado, boleado y aireado de la masa de la pizza y el imponente horno italiano. Parece sencillo, pero cuando esa pizza llega a la mesa despierta la serotonina de los comensales antes incluso de probarla. Tras el primer bocado, ya está pensando en el segundo, cruzando miradas de asombro y pensando en recomendar el sitio.
(Imagen de portada: Pizza matrimonio. 28 €.)
Todo comienza con la harina ecológica que utilizan para elaborar la masa de sus pizzas, molida a la piedra y tratada con filosofía slow food. Después, la combinación acertada de productos de mucha calidad y comprados a pequeños agricultores con Denominación de Origen, como diferentes tipos de tomates, cebollas, Calabresa artesanal, Mozzarella, tapenade, anchoas de Santoña, albahaca fresca o lonchas de paleta ibérica 100% bellota.
La pizza paulista es crujiente y ligera, la diferencia clave es que el chef Deco Lima las deja más de 3 minutos en el horno, a diferencia de la pizza napolitana que se cocina en menos de dos. Así, el pizzaiolo de San Paolo consigue más crujiente, al llevar al límite la humedad de la masa.
Después, los ingredientes hacen el resto. En San Paolo puedes pedir una sola pizza de diferentes ingredientes, su tamaño lo permite. Por lo que es muy cómodo para probar diferentes sabores en una misma base de masa al horno.
En la carta de San Paolo, las pizzas se dividen en dos grupos, pizzas rojas y pizzas blancas. Las primeras llevan salsa de tomate en su elaboración, las segundas no. Entre las pizzas rojas, destacamos la Amatriciana, con tomate, cebolla, guanciale (tocino o careta de cerdo) y queso Pecorino. También, la pizza matrimonio (imagen de portada) con anchoas, boquerones y piparras o la de chistorra y brécol.
En las parte de las pizzas blancas, la de cuatro quesos españoles está riquísima, así como la de mortadela con burrata o la de carbonara.
Todas las pizzas de San Paolo tienen un tamaño muy generoso, por lo que son perfectas para compartir. Antes, recomendamos comenzar la comida con alguno de sus diez cócteles, y para acompañar la pizza, puedes pedir antipasti, como paté de anchoas, escabeche de ternera y caponata italiana; y ensaladas, como la rosbif, con finas lonchas de lomo bajo de Rubaiyat.
Una cava acristalada da una buena pista de la selección de vinos para acompañar la comida. Entre ellos, vinos de Piamonte, cavas, champán, rosados, o tintos de Rioja.
Para finalizar la experiencia gastronómica, prueba de postre el cannoli, un canelón frito con crema de pistacho y queso ricotta. También tienen el pudin de leche brasileño.