Artista fundamental del modernismo catalán de fama europea, Ramón Casas (Barcelona 1866 – 1932) fue una de las grandes figuras que contribuyeron a la internacionalización de la pintura catalana de finales del siglo XIX. Junto con artistas como Santiago Rusiñol, Casas realizó una aportación muy destacada al objetivo de convergencia con los movimientos europeos, sobre todo los que se gestaban en París.
El pintor ha permanecido en el imaginario popular de la cultura catalana como icono nacional de artista moderno. Sin embargo, es importante matizar que al final Casas también acabó aceptando la lógica de la demanda burguesa, que prefería un arte que transmitiera valores de orden inmutables, contribuyendo a garantizar la continuidad de los privilegios de clase.
La exposición Ramón Casas. La modernidad anhelada incluye una selección de dibujos, carteles y cuadros del pintor catalán y los compara con artistas contemporáneos de su época. Este ejercicio de comparación sirve para presentar a Casas dentro del contexto europeo y aporta más elementos para valorar la verdadera dimensión de la creación artística del pintor. Casas también fue permeable a las nuevas técnicas, como el cartel, la fotografía o la estampa japonesa. Su interés por utilizar nuevos medios no solo demuestra su carácter versátil, sino que también enseña uno de los aspectos más relevantes de su deseo de conectar con la modernidad.

1897
Además de sus pinturas fueron célebres sus retratos y caricaturas, también sus pinturas, de la élite social, intelectual y política de Barcelona, Madrid y París de su época.
Fue diseñador gráfico y sus carteles forman parte del concepto de modernismo catalán.
En la exposición, el visitante puede pedir un recorrido guiado para acercarse mejor a la singularidad del artista. También se celebran tertulias alrededor de un café, talleres educativos y conferencias a cargo de los comisarios de la exposición.
CaixaForum Madrid. Hasta el 11 de junio. Entrada 4 €.