La ciudad de Madrid tiene dos Estatuas de la Libertad, una corona el mausoleo de los liberales Calatrava, Argüelles y Mendizábal y la otra forma parte del frontón del Palacio de las Cortes. Ambos monumentos fueron realizados por el escultor neoclásico zaragozano Ponciano Ponzano*.
Madrid tiene dos Estatuas de la Libertad
Uno de los monumentos más famosos del mundo está en Nueva York: la Estatua de la Libertad. Visitada por millones de turistas entre ellos muchos españoles que no saben que aquí en Madrid también tenemos una estatua de la Libertad madrileña, que es incluso anterior a la neoyorquina.
Imagen de portada: Monumento a la Libertad en el Panteón de los Hombres Ilustres.
Quizá nuestra estatua no sea tan conocida ya que su tamaño es bastante menor y porque se encuentra en un lugar un tanto inusual: El Panteón de Hombres Ilustres.
El Panteón de Hombres Ilustres se empezó a construir en 1891 tomando como modelo el cementerio de Pisa y el campanile de Florencia. Las obras, sin estar finalizadas, tuvieron que darse por concluidas en 1899 por falta de financiación. Del ambicioso proyecto tan sólo se pudo materializar el campanile y tres de las cuatro galerías del claustro-panteón. Desde 1901 hasta 1906 fueron recibiendo sepultura los restos de algunos políticos como Canalejas, Sagasta, Eduardo Dato, Ríos Rosas, o Cánovas del Castillo. En 1912 se trasladó también al patio del panteón un mausoleo, denominado Monumento a la Libertad, y que contenía los sarcófagos de Mendizábal, Argüelles y Calatrava.
La estatua de la Libertad se inauguró el 20 de febrero de 1857 en el antiguo cementerio de San Nicolás, situado en la calle del Sur, entre el Paseo de Delicias y el Paseo de Atoch, donde permaneció hasta que el cementerio desapareció y fue trasladada al patio del Panteón de Hombres Ilustres.
El momumento se empezó a construir en el 1853 para recordar a tres grandes ilustres liberales españoles: Agustín Argüelles, José María Calatrava y Juan Álvarez Mendizábal. El proyecto corresponde a Federico Aparici, el cual ideó un túmulo cilíndrico rematado con una estatua de la Libertad. En las paredes exteriores se esculpieron las alegorías de la Pureza, el Gobierno y la Reforma; el monumento a la Libertad.
En 1912 se trasladó también al patio del panteón un mausoleo, denominado Monumento a la Libertad, y que contenía los sarcófagos de Mendizábal, Argüelles y Calatrava.
La Estatua de la Libertad que corona el monumento es obra del escultor Ponciano Ponzano. Se presentaba con un gorro frigio, coronada con rayos solares, pecho semidesnudo, portando en su mano izquierda un cetro y en la derecha un yugo roto sobre el que apoya un pie, y termina el grupo escultórico con un gato en su parte inferior.
En el Mundo Antiguo los esclavos liberados usaban un gorro de forma cónica conocido como gorro frigio o de liberto y que se convirtió en el símbolo de la libertad. Este gorro fue adoptado por los revolucionarios franceses en 1789, difundiéndose por toda Europa y América como símbolo del régimen republicano y la libertad.
En la estatua aparece un yugo roto que simboliza el final de la opresión y el gato como animal difícil de controlar, también refuerza la idea de libertad. Y finalmente la corona de rayos con su forma circular nos indica la perfección y la luz que ilumina el alma del triunfador, es pues el signo del éxito de la libertad.
La segunda estatua de la Libertad
Por otro lado, la estatua de la Libertad neoyorquina fue obra del escultor francés Bartholdi como regalo de Francia a Estados Unidos con motivo de la celebración del centenario de la independencia en 1876. Pero la estatua llegó diez años tarde, ya que hasta 1886 no fue inaugurado el monumento. La estatua de Bartholdi se inspira en su pose a su vez en una estatua de una dama egipcia que presentó para presidir el canal de Suez y que fue desestimada. El francés estaba obsesionado con la monumentalidad de Egipto y aunque la estatua americana tiene treinta y tres metros de alta y la madrileña tiene solamente dos, posiblemente Bartholdi se inspiró en la libertad madrileña para realizar la coronación de la suya, puesto que otra estatua de la libertad que está en Madrid, también obra de Ponzano, porta la diadema de rayos, (cuando lo normal era que la libertad se representase tan sólo con el gorro frigio o pileus). Esta es la estatua de la Libertad del Congreso de los Diputados creada en 1848. Por lo que podemos afirmar que nuestras estatuas de la Libertad madrileñas son anteriores a la neoyorquina y posiblemente pudieron influir en esta de cierta manera.
*El ESCULTOR Ponciano Ponzano y Gascón (Zaragoza, 19 de enero de 1813-Madrid, 15 de septiembre de 1877) fue un escultor neoclásico español. Fue un hombre perfeccionista, arisco, terco, supersticioso e inclinado a la sorna, falleciendo además repentinamente, lo que ha dado lugar a muchas anécdotas sobre él. Gustavo Adolfo Becquer le menciona en su obra. Cuando Ponciano Ponzano murió, era tan pobre que la Real Academia de San Fernando tuvo que hacer una contribución financiera, disfrazándola como una compra de dibujos para que se le pudiese enterrar.
Texto de Luis Pérez. Historiador del arte y gestor cultural. Presidente de Madrid en Ruta.