Del jueves 30 de mayo al domingo 2 de junio, en la Plaza Mayor de Madrid con entrada gratuita.
Feria nacional de sello en Madrid
En esta feria del sello podrás comprar y vender medallas de oro de las olimpiadas de Barcelona 92, monedas de oro del imperio romano o billetes de 20.000 pesetas que nunca vieron la luz.
Puedes tasar tus sellos y monedas o simplemente pasear entre piezas de coleccionista que te hablan de la historia.
Monedas
Se podrán ver una selección de 12 Áureos (las monedas de oro que se acuñaban durante la época romana). Entre ellas destacan algunas piezas excepcionales, por su belleza y calidad, como los áureos de Nerón, Trajano o Vespasiano.
Posiblemente el áureo romano, por su gran belleza y rareza, sea una de las piezas numismáticas más buscadas por los coleccionistas.
Filatelia
Podremos admirar los dos bocetos originales en acuarela con las inscripciones para la impresión combinada de un sello de 4 Pesetas conmemorativo del 50 Aniversario del Mercado Filatélico de la Plaza Mayor de Madrid, realizadas en 1976 y que no llegaron a emitirse. Firmados por el grabador de la FNMT, M. Salamanca siendo ejemplares únicos.
Billetes
Destacan 3 piezas muy exclusivas: pruebas de distintos billetes del periodo del rey Juan Carlos, entre ellas, una prueba de un modelo no adoptado de un billete de 20000 Pesetas.
Plan con niños
III Concurso Infantil Monta y Colorea tu Colección de Sellos. Organizado por ANFIL, con gran éxito en las dos ediciones anteriores, en el que los pequeños participarán pintando sus propias creaciones, un momento artístico y colorido que contará con un pack de iniciación a la filatelia como premio a las 3 mejores obras realizadas. Sólo para niños hasta 12 años.
¿CONOCES EL ORIGEN DE LOS SELLOS?
Su origen se remonta al siglo XIX cuando los migrantes del campo a la ciudad que acudían a la llamada de la revolución industrial se veían obligados a comunicar a sus familiares que estaban bien. En ese momento, la comunicación se pagaba en destino según la distancia recorrida por el cartero, sin embargo, se encontraba frecuentemente con destinatarios que no podían hacer frente al pago y la carta era devuelta. Cuenta la leyenda que el inventor del sello, Rowland Hill, un modesto maestro inglés que llegó a ser Jefe de Correos, vio llegar un cartero a la posada escocesa en la que se encontraba para entregar una carta a la posadera que, aludiendo situación de pobreza, la devolvió. En ese momento, conmovido, se ofreció a pagar él mismo la misiva y cuál fue su sorpresa cuando observó que la compungida posadera dejó a un lado la carta sin abrir ni hacerle el menor caso. Entonces se decidió a preguntarle por su falta de interés y ella le confesó que no abría la carta porque tenía la certeza de que estaba vacía, ya que los familiares habían acordado mandar solo un sobre con remitente y así ya sabrían que el pariente estaba bien y se evitarían el pago al cartero. Esta picaresca hizo que el maestro regresara a Inglaterra tras su viaje por Escocia decidido a revolucionar el sistema postal con el nacimiento de del franqueo postal por adelantado tal como se conoce hoy.