La sala Moby Dick cumple 30 años el 26 de marzo y lo celebra con un programa de conciertos.
Cuando las puertas de la Sala Moby Dick se abrieron por primera vez aquél 26 de marzo de 1992. Situado en el número 5 de la Avenida Brasil y bajo un nombre que homenajea la mítica canción de Led Zeppelin, la Moby Dick se convirtió en poco tiempo en el santuario del rock and roll madrileño.
El primer concierto llegó de la mano de unos jóvenes Montana. Desde entonces, han pasado por su escenario miles de bandas y artistas nacionales e internacionales en torno al indie, aunque también abarcan otros géneros como el rock, psicodelia, urban, metal, folk, soul, jazz… Por ejemplo, The National, hoy habituales de los pabellones, vivieron su debut madrileño en la primavera de 2005, ante un grupito de curiosos. O el estreno de unos jovencísimos Lori Meyers como teloneros de The Sunday Drivers.
Treinta años después la Moby Dick sigue programando contra viento y marea.
Conciertos
VIERNES 18- LOS PILOTOS
«Alianza Atlántica» es el tercer LP de Los Pilotos, la banda paralela de Banin y Florent de Los Planetas. Once liberadoras canciones para que los cuerpos vuelvan a rozarse en la pista de baile, bañadas en ritmos electrónicos y sintetizadores planetarios que crean una atmósfera psicodélica inolvidable.
SÁBADO 19- MOHAMA SAZ
Mohama Saz es un grupo único. Músicos forjados en los bajos fondos madrileños que han participado en algunos de los proyectos más personales y arriesgados de las últimas dos décadas y han creado bandas y discos catalogados como «de culto» por muchos melómanos y amantes de lo insólito. El sábado 19 presentarán en Moby Dick su último disco «Quemar las Naves».
JUEVES 24- THE RAT PACK: GALLOS
En esta edición, los Gallos contarán con artistas como Playa Cuberris, Desvariados, Los Sex, Los Fesser, Reciclaje…, en la que sereá una noche en torno a una temática muy clara: el ROCK.
VIERNES 25- LOS RASTREADORES (ORTIGA Y GRANDE AMORE)
Pocos grupos tienen menos que ver, musicalmente hablando, que Ortiga y Grande Amore. Pero a su vez, pocos comparten entre sí una visión tan estrecha de las cosas que les gustan de la música. De ahí nace su proyecto «Los Rastreadores», un insólito EP de seis cortes con elementos de techno, rumba, ritmos latinos, rap… Y el resultado es todo el pop y todo el punk que podría ser.
Sala Moby Dick. Madrid.