Hace frío en Madrid y el arte nos inunda con decenas de opciones en formato feria o exposición. Qué mejor plan que, tras dedicar unas horas a pasear entre cuadros, recogernos en un buen restaurante a rajar, comer y beber con los amigos.
Restaurantes de Madrid
Los nigiris de Genko
El chef Víctor Camargo (ex chef de BAAN) presenta un nuevo proyecto con una carta con influencias chinas, indochinas y japonesas.
A elegir entre 28 platos diferentes, que cambian cada dos meses, el chef busca ofrecer calidad, creatividad y una experiencia inolvidable en formato festín.
Entre los nigiris y uramakis que se pueden encontrar destacan el nigiri de vieras con emulsión cítrica y escamas de pan japonés; el nigiri de foie caramelizado con salsa casera de anguila y frambuesa liofilizada; para seguir con el uramaki spicy tuna con kimuchi al chipotle, uramaki dragón o la opción vegetal con futomaki vegetal de aguacate, pepino, goma, wakame, lechugas takwan y zanahoria.
Genko está en la calle Velázquez, 47. Madrid.
Champagne en el Ritz
El rincón más exclusivo del hotel para los amantes del champagne presenta las masterclass de Champagne Bar, de la mano del Equipo de Sumilleres de Mandarin Oriental Ritz, Madrid. Con amigos, en pareja o familiares, Champagne Bar permitirá maridar deliciosas copas en un experiencia que une exquisitez con curiosidad y aprendizaje.
La primera masterclass analizará el champagne Blanc de Blancs, elaborado exclusivamente a partir de la variedad Chardonnay. Desde el viñedo hasta la copa, los secretos del Blanc de Blancs serán descubiertos cada viernes del 8 de marzo al 26 de abril de 18:00 a 19:30. Precio 202€. por persona. + Info
Restaurante Ita: bistró con sumiller
Mariela Fernández Brandt y William Lamas, cocinera y sumiller, abren ITA un espacio que se nutre de pequeños productores con platos de sabores reconocibles a través de ingredientes ecológicos, de calidad y de temporada, a la vez que proponen una gran experiencia con los vinos. Un proyecto en el que la oferta líquida del local apuesta por bebidas inusuales: kombuchas de autor bajas en graduación alcohólica, vinos bajos en sulfuroso y botellas artesanas de pequeños productores.
Las verduras tienen un peso importante en su cocina. Descubrimos buenos platos como la remolacha balsámica, alcaparrón y queso feta o el apionabo en compañía de rabanitos, labneh y za’atar, configurando otro plato sorprendente, difícil de encontrar en otro restaurante. Destacar también el radicchio, cogollos, champiñones y queso Parmigiano Reggiano o las lentejas verdinas con kale, boniato, especias y leche de coco. La verdura también se cuela en los irresistibles ravioli hechos a mano y que llegan junto a queso de cabra, nueces pecanas y mantequilla noisette. Este plato, uno de los favoritos de los clientes, lleva ahora calabaza pero el relleno de la pasta irá variando con la temporada.
ITA está en la calle General Oráa, 42. Madrid.
La cocina libanesa de Onoé Bistró
Onoé Bistró ha llegado al barrio de Salamanca (ubicado en la calle Hermosilla, 65) ofreciendo una propuesta que combina la rica tradición culinaria del Líbano con influencias y raíces mediterráneas.
En su carta destacan platos como la burrata Onoé, una reinterpretación del clásico italiano,ya que todo se asienta sobre una tradicional musakaa libanesa. ElShish Momo es quizás el plato más especial del bistró libanés, ya que es un viaje por la cocina familiar de Reem Jundi, una preparación que combina la carne de solomillo de ternera (con la crema de cacahuete), el hummus y la muhammara.
